Mi tiempo
se esparcia…
Y no puedo tocarla.
Y no puedo tocarla.
El aire la acaricia en la sutileza de mi mirada,
mientras dibujo las palabras…
mientras dibujo las palabras…
Compuesta por coordenadas irreales,
pero marcadas.
Desajustada ante la lógica que abraza;
se me escapa.
Y yo con palabras…
Ilumino la esperanza,
envuelta en ilusiones desubicadas,
perfiladas.
Ni siquiera puedo rozarla…
Cada letra baila en el equilibrio emocional,
al compás de una métrica
que forman mis versos.
Con la candencia del sentimiento que lanzo al viento,
en cada rima la contengo.
Mis palabras…
Armonizan la agonía de un pensamiento.
En sus labios me siento,
me libero,
me libero,
al ver como cada movimiento
se funde y acompasa,
en su boca
que besa el sonido al pronunciarlas.
En mi mundo me desvanezco…
Pero la tinta de mis versos me conserva.
Deteniendo por un instante el tiempo;
su tiempo.
Segundos de caricias tatuadas en su alma
al poder rozarla;
lo consigo sólo con palabras.
Soraya.
Hermoso mucho niña, penetra en la piel y ... Besitos.
ResponderEliminarMuchas gracias, Maríjose!!! Me alegra mucho que te guste :-)) y perdona mi demora en contestarte.
EliminarBesitos!!!!